Si estás en tu trabajo y corto de tiempo pero no te querés quedar sin tu sesión del día, te proponemos una rutina de entrenamiento que no te llevará más de 30 minutos.
El eje principal serán las aceleraciones progresivas.
Cuando tengas los minutos contados para escaparte del trabajo podés emplear esta rutina y así por lo menos sumarás algo a tu plan en vez de quedarte sin hacer actividad física. Recordá que todo suma.
- Primeros 6 minutos: Calentá con un trote a ritmo medio.
– - Del minuto 7 al 18: Hacé ocho series fuertes de 30 segundos con 1 minutos de trote entre cada seria. Te llevará unos 12 minutos.
– - Del minuto 19 a 28: Carrera progresiva de 10 minutos, empezando justo detrás del minuto de trote de las series. Hacé los dos primeros minutos a ritmo de media maratón y aumentá la velocidad cada 2 minutos. Es probable que cueste pero debés aguantar ya que tu entrenamiento va ser corto.
– - Minutos 29 a 30: Hacé un enfriamiento suave.