El encuentro con Diego Maradona fue el viernes 15 de abril de 1994. “Nos reunimos alrededor de las 19.00 en Casa de Gobierno. Vino junto a su esposa. Una visita muy grata y donde habló muy bien del pampeano, de su hospitalidad y del respeto con el cual lo trataban”.
En principio, Marín relató que “él había llegado a La Pampa para prepararse para el Mundial y estaba parando en un Campo de la zona cercana a Santa Rosa. Me llamaron y Diego llegó alrededor de las 19.00 a Casa de Gobierno. No había nadie y sólo estábamos mi secretario y yo”.
El ex Gobernador reveló que en el inicio del encuentro “fueron cuatro cosas las que les dije. En aquel momento para algún medio manifesté que habían sido solo tres. Pero dije tres porque no quise decir la otra. Primero, que los dos veníamos de abajo, realmente, yo vengo de una familia muy humilde y él también. Por supuesto la altura que agarró él no es la mía, pero indudablemente tenemos algunas cosas en común. Los dos somos bosteros (hinchas de Boca). Vos sos amigo de Fidel Castro, pero yo lo conocí. Y la cuarta no puedo pensar otra cosa que sos peronista, a lo cual se largó a reír”.
“El día de su fallecimiento a la noche no pude dormir – afirmó-, creo que a todos los argentinos nos pegó. Él nos feliz con una pelota en los pies. Realmente es así. En estos momentos nos olvidamos de cuestiones personales porque creo que no corresponde. Me quedo con lo que dijo el escritor rosarino, Roberto Fontanarrosa: “Qué me importa lo que Diego hizo con su vida, me importa lo que hizo con la mía”.
Cabe recordar que la preparación de Diego de cara al Mundial 1994 en Estados Unidos fue en una estancia llamada “El Marito”, que Don Ángel Rosa había puesto a disposición de Maradona un tiempo atrás. Diego había conocido a la familia en una playa del sur bonaerense”, reveló.
