Es común entre los corredores principiantes, que aún no consiguen crear una rutina de ejercicios durante la semana, intentar compensar los entrenamientos perdidos durante los días de descanso. Esta práctica, sin embargo, puede traer algunos riesgos para la salud del atleta de fin de semana, como mayores probabilidades de tener lesiones e incluso problemas cardíacos.
Según una encuesta publicada en la revista JAMA (Journal of American Medical Association), los corredores de fin de semana tiene un 2,7 veces mayor riesgo de desarrollar problemas cardíacos o sobrecargar el corazón con un esfuerzo físico al que no está acostumbrado.
En relación a los traumas, los esguinces y lesiones que fuerzan a los ligamentos suelen ser los más comunes entre los atletas de este perfil. Se pueden clasificar en diversos grados y son seguidos por lesiones musculares, causadas por un esfuerzo mayor al cual el cuerpo está preparado para realizar.
Debido a que es una región que recibe un impacto suficiente durante la corrida, la rodilla necesita un cuidado especial. Las lesiones son comunes en esta parte del cuerpo, ya que es un tipo de articulación de bisagra, es decir, tiene un solo eje de movimiento. Cualquier esfuerzo lejos de la dirección del movimiento puede dañar los componentes de la articulación, especialmente los ligamentos, meniscos, cartílago e incluso parte del hueso.
Para evitar estos problemas, lo ideal es que el corredor también entrene regularmente durante la semana. Sin embargo, algunas medidas también pueden ayudar a reducir el riesgo del atleta de fin de semana, como estirar y calentar adecuadamente antes de empezar cada sesión. Después del entrenamiento, la manera correcta de terminar tu serie es enfriar el cuerpo poco a poco y estirar luego.