El Verde no solo lidera su grupo, sino que además lo hace con comodidad y empieza a despegarse.
Cuando comenzó la temporada del Torneo Federal de Básquetbol 2017/2018 meses atrás el objetivo para Ferro de Pico era claro. Había que amoldar un equipo completamente nuevo para buscar una buena actuación e intentar ingresar a los Play Off.
Tras un buen arranca vino una recaída, después de varias victorias al hilo llegaron igual cantidad derrotas. Pese a ello, y a la lesión de algunos jugadores importantes, el equipo de barrio Talleres no decayó y supo reponerse de las heridas para salir adelante y demostrar que es, hoy por hoy, el gran candidato a quedarse con la División Cuyo.
Sin duda que el presente positivo es un todo conformado por una suma de piezas de calidad y dedicadas plenamente a su tarea. El cuerpo técnico cuenta con un entrenador de la calidad de Carlos Bualó, a quien acompaña no solamente la experiencia, sino también el éxito. En cuanto al plantel, hay nombre de peso como Diego Alba, Sebastián Castiñeira o Pablo Orlietti, pero siempre bien acompañado por jóvenes promesas como Agustín Bualó y referentes locales como Cristian Negrotto o Agustín Thompson, quienes han demostrado un nivel superlativo.
Otro párrafo merecen los dirigentes verdolagas que hicieron una apuesta fuerte, para estar por primera vez en un torneo nacional. A ellos se suma la gente, que se entusiasmó desde el arranque, apoya constantemente al equipo en la cancha y ya se ilusiona con que esté presente de éxito se transforme en un futuro de gloria.