Manu, que suma cuatro anillos de campeón, inicia una nueva aventura con los Spurs; Prigioni se ilusiona con la aventura en los Clippers, y Scola emigró a Toronto; mañana arranca la acción, con tres juegos.
Ya se escuchan los latidos del mejor básquetbol del planeta. Apenas 24 horas más y comienza el show. Los ojos del mundo estarán allí concentrados, y en la Argentina la atención se dividirá entre San Antonio, Los Ángeles y Canadá. Los nombres deEmanuel Ginóbili , Luis Scola y Pablo Prigioni estarán nuevamente en el centro de la escena y serán protagonistas en equipos que pretenden quedarse con el anillo de la NBA. Un privilegio que alguna vez resultó impensado y que hoy se transformó en algo increíblemente natural. Aun cuando nuestro país mantiene su lugar en la elite, las luces de esta aventura 2015/2016 apuntarán lógicamente a la sed de LeBron James, la vigencia de Kobe Bryant, el desenfado de Sthepen Curry, el talento de James Harden, la potencia de LaMarcus Aldridge, el deseo de Antonhy Davis, la furia de Marc Gasol, la explosión de Blake Griffin, la experiencia de Pau Gasol y la ilusión de ver finalmente en su esplendor a Derrick Rose (en las últimas horas circuló un rumor sobre que podría dejar Chicago para ir a los Lakers).