La Asociación del Fútbol Argentino repudió lo acontecido en Mendoza, donde hubo disparos con armas de fuego donde un entrenador fue herido.
La Asociación del Fútbol Argentino en conjunto con el Consejo Federal, manifestaron su repudio en un comunicado ante los gravísimos hechos acontecidos en Mendoza el día domingo, donde hubo disparos que salieron desde las tribunas y con varios heridos, entre ellos el DT de Ferro de General Pico, Mauricio Romero.
Según el comunicado, el Tribunal de Disciplina Deportiva del Consejo Federal ya se encuentra reuniendo tanto las pruebas como los informes de las autoridades del partido (árbitros), de la Liga Mendocina de Fútbol, de ambos Clubes, además de artículos publicados en los medios de prensa para conformar el expediente para una sanción, que se espera, será durísima.
El comunicado de la AFA:
La Asociación del Fútbol Argentino y el Consejo Federal manifiestan su más enérgico repudio contra los graves hechos acontecidos en ocasión del partido por la 30ª. Fecha del Torneo Federal A, entre los primeros equipos del Club A. Huracán Las Heras y el Club Ferro Carril Oeste (Gral. Pico).
En tal sentido, el Tribunal de Disciplina Deportiva del Consejo Federal ya se encuentra reuniendo los informes de las autoridades del partido (árbitros), de la Liga Mendocina de Fútbol, de ambos Clubes, como así también de los artículos publicados en los distintos medios de prensa, a los fines de sustanciar el correspondiente expediente, otorgar los traslados pertinentes, y determinar la sanción a aplicar a aquellos que por sus responsabilidades en la materia resulten comprometidos en estos hechos.
Asimismo, lamentamos profundamente el momento por el que debió atravesar el público asistente, ambos planteles, autoridades; como así también la agresión física sufrida por el Director Técnico del Club Ferro Carril Oeste, señor Mauricio Romero, a quien le ansiamos un pronta y total recuperación.
Continuaremos trabajando día a día para seguir combatiendo esta clase de acontecimientos provacados por unos pocos inadaptados que no hacen más que empañar la verdadera fiesta que genera un partido de fútbol.