«Dejo el básquet de la manera en que yo quiero dejarlo: compitiendo en el más alto nivel de Europa y en un club de máxima jerarquía mundial», anunció el jugador del Real Madrid
Andrés Nocioni, el Chapu, (Santa Fe, 1979) se retira. El jugador anunció que dirá adiós a las canchas a final de temporada. Será el punto y final a una carrera de más de 20 años en la que ha ganado títulos a ambos lados del charco y en la que ha brillado en la NBA. Con su retirada, el baloncesto pierde un alma indomable y un competidor insciable, señas de identidad ambas de una excepcional Generación Dorada argentina que se apaga poco a poco.
«Viví como jugué. Fui siempre honesto y entregué mi corazón en cada club en el que estuve; todos los días, todas las prácticas, todos los partidos. Dejo el básquet de la manera en que yo quiero dejarlo: compitiendo en el más alto nivel de Europa y en un club de máxima jerarquía mundial», explica el jugador del Real Madrid en una carta publicada este lunes en su perfil de Twitter. En esa misma carta, Nocioni utiliza la ironía para exponer los motivos de su adiós:
«Después de tantas batallas, he decidido dejar de reventar la botella de agua contra el piso cada vez que me sustituyen, mojando a compañeros, asistentes y plateístas de primera fila. De tirar toallas, de patear bancos, de insultar al aire. He decidido madurar, señores. Me cansé de discutir con los árbitros por fallos que nunca sabremos si fueron erróneos. No quiero que me cobren más faltas técnicas ni tampoco volver a pagar gimnasios o cenas de equipo a cuenta de mis multas. Debo progresar. Lo he meditado lo suficiente. Basta de pelear con rivales, basta de noches sin dormir por victorias con angustia o derrotas que son puñales. Se terminó… Pretendo mejorar mi conducta, mis hábitos.Y como tengo en claro que no podré cambiar mi temperamento jamás, ME RETIRO. Me voy antes de que me echen».