En una conversación reciente con Ariel Hernández, presidente de Ferro de Pico, se abordaron los desafíos que enfrenta el club en el ámbito deportivo, específicamente en el torneo Federado de Fútbol. A pesar de ser una de las instituciones que más ha crecido en los últimos años en términos de infraestructura y desarrollo, Ferro de Pico atraviesa un momento complicado en lo futbolístico. Con solo tres partidos restantes, el equipo depende de sus propios resultados y algunos ajenos para mantener la categoría o enfrentar el descenso.
Un Año de Altibajos y Decisiones Críticas
Hernández reconoció que este ha sido un año particularmente difícil para el club. «Ha sido un año que tampoco hemos transitado con mucha suerte en lo deportivo», comentó, atribuyendo parte de los desafíos a deficiencias propias y a una serie de eventos desafortunados, como la salida del cuerpo técnico inicial. «Primero fue el golpe del cuerpo técnico que emigró, o el técnico principal, que es el que había armado el plantel», explicó. A esto se sumaron los retos con el interinato de Nelson Benítez, donde, a pesar de un rendimiento superior en comparación con otros equipos, los resultados no fueron los esperados. «No queda otra, también es parte del fútbol y también es parte de esto, de un año deportivo duro y complicado», agregó Hernández.
La Esperanza de Mantener la Categoría
A pesar de las dificultades, el presidente de Ferro de Pico se mostró optimista. «La fe es lo último que se pierde, hay que seguir trabajando», afirmó. La situación actual del club es crítica, dependiendo en gran medida de sus resultados en los próximos encuentros contra rivales directos. «Depende bastante de Ferro, también un poco depende de qué hagan los otros dos equipos los que tenemos que alcanzar», detalló Hernández. Con tres fechas restantes y nueve puntos en juego, el destino del equipo aún está en sus manos, pero requiere un esfuerzo concentrado para superar a sus oponentes directos.
El Papel de la Afición y la Infraestructura del Club
Hernández también reflexionó sobre el papel de la afición y cómo su apoyo ha fluctuado a lo largo de los años. «Indudablemente que Ferro en este tipo de torneo no ha tenido el acompañamiento de la gente», señaló, destacando que el entusiasmo de los hinchas ha disminuido desde los primeros años en esta categoría. Sin embargo, el club continúa trabajando en mejorar su infraestructura y ofrecer una mejor experiencia tanto a jugadores como a aficionados. «En unas semanas, cuando esté lindo, se van a inaugurar las luces del estadio que están prácticamente terminadas», anunció, mostrando el compromiso de la institución con el desarrollo y la mejora continua.
Mirando al Futuro
A pesar de los desafíos, Hernández se mostró resiliente y enfocado en el futuro del club. «Hay que seguir esforzándose porque la gente de a poco acompañe y vuelva a ver el fútbol», dijo, enfatizando la importancia de mantener la categoría, pero también recordando que el descenso no sería el fin del mundo para el club. «No es caer al vacío, es simplemente una cuestión deportiva», concluyó, destacando que el verdadero enfoque debe estar en la reconstrucción y el crecimiento continuo.