En comunicación con «La Redacción» por INFOPICO RADIO 99.9 Delfor Vasilchik, ex jugador de Ferro de Pico y parte del equipo que logró el ascenso de Ferro al Nacional B en el año 1984, recordó aquel partido histórico que consagró al verdolaga campeón.
Fue un 7 de junio de 1986 cuando Ferro Carril Oeste de General Pico, logró el ascenso al Torneo Nacional B luego de haber participado en el Torneo Nacional A entre los años 1984/1985.
En aquel entonces se jugaron dos partidos con All Boys para definir quien iba al Nacional B, el primer encuentro fue en la cancha de Ferro de Pico donde los equipos igualaron 1-1.
El segundo partido, según recuerda Vasilchik, se jugó un domingo por la mañana en el estadio de All Boys de Santa Rosa, finalmente el encuentro terminaría 1-0 con gol de Juan Carlos Almada dándole así la posibilidad al verdolaga de ascender al Nacional B.
Se trataba de una época en que la AFA había tomado la decisión de federalizar el fútbol, lo cual apuntaba a que cada provincia tuviera un representante.
Delfor Vasilchik Llegó a Ferro como refuerzo en el año 1984. Recuerda todavía el primer partido que jugó contra Boca en Bariloche, donde sufrió una lesión en su rodilla que lo alejó de las competencias por un tiempo. «Estuve acompañando al plantel por todos lados que después lograron la clasificación para jugar en el Nacional contra Boca, Newells y Talleres».
Por entonces el equipo del barrio Talleres era dirigido por José Aragonez, el ayudante técnico era Juan Carlos Martín y como preparador físico Miguel Angel Hubert.
Por su parte, Vasilchik los recuerda con gran cariño y asegura que se trataba de un «gran cuerpo técnico, como José, Hubert y Juanca Martin, apasionados del fútbol que marcaron una época acá en La Pampa y en Ferro sobretodo».
«Yo soy fanático de Ferro, para mi futbolisticamente marca una diferencia muy grande en lo que es La Pampa, lo digo muy apasionadamente porque soy Ferro y lo viví».
Vasilchik jugó durante un año en la Primera División de la AFA vistiendo los colores de Instituto, aún así, remarca que su mayor suerte fue jugar en Ferro de Pico.